Son materiales, en general, muy flexibles y ligeros, que tienen gran resistencia al choque térmico y muy baja conductividad térmica, incluso aunque se humedezcan, tras secarse no pierden propiedades y el aluminio fundido no les moja. No tienen resistencia mecánica ni resistencia a la abrasión, son atacados, en general, por ácido fluorhídico, fosfórico, componentes básicos y atmósferas reductoras, otros de sus principales inconvenientes es que necesitan de un pequeño mantenimiento anual debido a sus contracciones pero no almacenan calor con lo que el equipo no gasta energía en calentarlas, tienen un gran aislamiento con lo que la variación de temperatura es muy grande en espesores pequeños y son de fácil y rápido montaje tanto para su reparación como para su nueva instalación, su aplicación en general es muy buena para cualquier tipo de horno y zona que no tenga que estar en contacto con la carga. Pueden ser fibras de vidrio, fibras cerámicas, fibras cerámica con refuerzo de vidrio, fibras cerámicas con refuerzo de inconel, fibras ecológicas (biosolubles, solubles) y fibras polycristalinas para temperaturas especialmente altas de hasta 1500ºC. Se pueden suministrar como mantas, módulos, bloques, placas, cintas, textiles, cordones, trenzas, papel, cartón, granel, masilla, productos y piezas conformados al vacío,… Se utilizan habitualmente como camisa de seguridad y como junta (entre ladrillos, hormigón, piezas conformadas y para el cierre de puertas, unión entre conductos,…). También se usan en cara de trabajo de hornos de tratamientos térmicos (hornos de carro, hornos campana,…), calentadores de cuchara, calentadores de artesas, como sándwich en calderas, paredes y bóveda de hornos eléctrico de arco, paredes y bóveda de hornos de laminación, coronas de hornos de vidrio, tuberías, pantallas térmicas, pantallas de proyecciones, distensionado de soldaduras (enfriamiento controlado de la soldadura), turbinas de gas, turbinas de vapor, protección de mangueras, protección de cables, protección de alambres,…
